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¿QUÉ DE NUEVO NOS TRAERÁ EL AÑO NUEVO?

Antes, hace ya muchos años, la expresión más usada para desear que pasaras unas buenas fiestas era esa de FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO NUEVO y algunos, los mas cursis, añadían aquello de BUENA SALIDA Y MEJOR ENTRADA DE AÑO. Pero luego llegó eso de lo “políticamente correcto” y la cosa se complicó un montón.

Algo de razón sí tenían aquellos objetores dado que, con el advenimiento de la multiculturalidad, uno no tenía que suponer que todo interlocutor celebraba el nacimiento del Niño Dios y que ese acontecimiento, ocurrido hace ya más de dos mil veintiún años, produjo un cambio tan importante en el mundo que de él, muchos, aún no se han repuesto.

Nosotros, los de nuestra generación, que ya hace décadas que peinamos canas, seguimos deseando, para nuestros familiares y amigos, lo mejor en estas Fiestas y por supuesto les deseamos, de todo corazón, Felicidad y Prosperidad para el año 2022 recién iniciado.

Pero siempre nos queda una duda. ¿A qué nos referimos cuando decimos “Próspero Año Nuevo”? ¿A qué alcanza esa prosperidad? ¿Nos referimos solo a lo material, bienes y dinero más que suficientes para hacer frente a las necesidades y caprichos de todos y cada uno de los miembros de nuestra familia, o incluimos también bienes espirituales: amor, comprensión, caridad…? ¿Debemos extender esta prosperidad a familiares lejanos, a nuestros vecinos y amigos? Pues sabido es que el disfrute no es pleno si sabemos que nuestros allegados están en la escasez o, peor aún, en la penuria.

Es posible que algunos pronuncien estas palabras de Felicidad y Prosperidad con cierta dejadez, sin pensar bien su contenido y alcance, pero, me atrevo a afirmar, que la mayoría de nosotros lo hacemos de todo corazón y que con toda certeza y verdad, estamos deseando para nuestro prójimo, esa felicidad y prosperidad que manifestamos. El que luego ese deseo se convierta en una realidad palpable, a lo largo del año que ahora comienza, depende de muchas cosas, empezando por uno mismo. Somos nosotros, los primeros, los que debemos poner todo aquello que esté a nuestro alcance para que los nuestros y nosotros mismos alcancemos a lo largo de todo el año esa prosperidad y bienestar que todos anhelamos.

Lo Nuevo que nos traiga el Año Nuevo está en nuestras manos, sin duda.

Nosotros, en nuestra Hermandad de Jubilados, estamos en ello y haremos todo lo que esté a nuestro alcance para conseguirlo. Necesitamos además la colaboración de todos vosotros, socios y simpatizantes de este gran proyecto, y si contamos con vuestra colaboración, entonces sí que estamos seguros de conseguirlo.